El director del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Oruro, Juan Carlos Challapa, informó este lunes la evolución de la salud de los más de 70 ancianos contagiados con el COVID-19 del hogar “La Sagrada Familia”, que fueron internados en diferentes nosocomios de esa ciudad la pasada semana, y otros que permanecen en dicho albergue bajo vigilancia médica.
“En la actualidad tenemos cinco en terapia intensiva I y cuatro ancianos en terapia intermedia II, de los cuales su evolución es estacionaria. También tenemos otros cinco pacientes que están en terapia intensiva del Hospital General San Juan de Dios, de los cuales cuatro estarían con ventilación mecánica y una es estacionaria; y tenemos una persona de 54 años en terapia intensiva del hospital Oruro Corea, su condición es estacionaria”, detalló Challapa.
El pasado 26 de agosto se realizó dos eventos a propósito del Día del Adulto Mayor, con el ingreso de gente externa a ese hogar, lo que provocó un contagio masivo del coronavirus y el 8 de septiembre el 80% de la población de dicho hogar contrajo el COVID-19, y se decidió el traslado de 35 ancianos a varios nosocomios y centros de alistamiento.
Según Challapa, todos reciben atención médica de galenos especialistas, incluso aquellos que se quedaron en el asilo son controlados de forma diaria por el centro de salud Candelaria que está a cargo del hogar La Sagrada Familia.
Hasta la pasada semana se reportó el fallecimiento de dos ancianos de los 77 contagiados, entre los albergados y el personal administrativo.
Finalmente, refirió que 24 ancianos están en el Centro de Inteligencia Epidemiológica (Cieso), que es un sitio de aislamiento dependiente del sistema público de salud.
