En una jornada calificada como histórica, el alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, abrió las válvulas para el ingreso de agua limpia a la laguna Alalay en el marco del plan de contingencia para recuperar este ecosistema y al amparo de la “Ley de Declaratoria de Emergencia Ambiental de la Laguna Alalay” aprobada por el ejecutivo.
La dotación de agua a la emblemática laguna Alalay es la fase más importante, luego del proceso iniciado el pasado 12 de septiembre con el dragado de la laguna, trabajo que significó el desplazamiento de más de 240 equipos de maquinaria pesada para retirar “lodos contaminados”.
Por su parte, el Servicio Municipal de Agua Potable Semapa habilitó un sistema de tuberías en la Laguna para que “el espejo de agua” reciba 120 litros de líquido por segundo.
Además, según el gerente de Semapa, Luis Prudencio. El caudal para alimentar la laguna Alalay no afectará en lo absoluto el suministro de agua en Cochabamba. Ya que en esta primera fase recolectarán agua proveniente de escorrentía, de las lluvias y pozos de Emavra, transportando el caudal por medio de tuberías existentes que se rehabilitaron para este importante proyecto.
Mientras que, en una segunda fase, sólo durante la época de lluvias, Semapa llevará agua cruda de Misicuni en cuanto se firme el respectivo convenio con la empresa, sin afectar el cupo de agua de OTB’s, Asociaciones, regantes, etc.
Beneficios de la recuperación de la laguna Alalay
Ecologistas sostienen que la recuperación de Alalay traerá varios beneficios a Cochabamba, entre ellos que brindará humedad a la ciudad que es una región seca por su topografía, por lo que la laguna funcionará como un gran humidificador
Asimismo, se convertirá en un corredor biológico para más de 60 especies de aves que habitan ese espacio ya sea de forma permanente o migratoria.
También Alalay protege a la ciudad de posibles inundaciones porque tiene la capacidad de acumular el agua que podría desbordarse del Rio Rocha y la Angostura. Y finalmente, la laguna recuperada se constituye en un pulmón urbano de más de 200 hectáreas, albergando todo un ecosistema natural de árboles y decenas de especies de aves, reptiles, roedores pequeños, ranas, sapos y al menos 50 especies de mariposas además de otros organismos más pequeños.