Una comitiva conformada por representantes de los sectores sociales e indígenas del Movimiento Al Socialismo (MAS) llegó hasta la plaza Murillo el miércoles para confirmar que el expresidente Evo Morales ingresará al país el 9 de noviembre a través de Villazón en medio de un operativo de gran envergadura.
El vocero era Álvaro Ruiz, alcalde del municipio tarijeño Uriondo y presidente de la Federación de Asociaciones Municipales de Bolivia (FAM).
En su alocución, el edil arenga que Morales tiene el derecho de retornar al país y para ese fin llegará el 9 al puente internacional Laquiaca- Villazón, desde donde partirá hasta Chimoré, en el Chapare, en medio de una caravana que recorrerá varios poblados, entre ellos Uyuni y Orinoca, su tierra natal.
«Es importante que el presidente Morales retorne, así como ha retornado Mario Cossio, Manfred Reyes Villa y Branko Marinković; es importante que llegue y aclare su situación y demostremos al pueblo boliviano que él ha sido inocente», dijo.
Para Ruíz, en las anuladas elecciones de 2019 no hubo fraude.
El secretario político del MAS, Rodolfo Machaca, confirmó a T-Informas que Ruiz es el organizador de todo el evento, que incluyen caravanas y al menos dos concentraciones, la principal en Chimoré, el bastión del frente que dirige Morales, procesado por la Justicia boliviana por los delitos de sedición, terrorismo y estupro, entre otros cargos.
El plan es que el exmandatario llegue a la región, por esencia cocalera, el 11 para rememorar la fecha en la cual partió rumbo a México tras renunciar a la Presidencia en medio de denuncias de un fraude que presuntamente lo favoreció.