La expresidenta Jeanine Áñez ingresó celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) en la ciudad de La Paz aproximadamente a las 07.00 de este sábado, luego de haber sido aprehendida en Beni por el denominado caso “golpe de Estado”.
Visiblemente afectada por lo que ocurre (antes de ella fueron aprehendidos dos de sus exministros, también en Beni) declaró a los periodistas que es víctima de un “atropello” y un “abuso de poder” que ejerce el Ejecutivo para “demostrar amedrentamiento y amenazas”.
“Como exmandataria tengo una situación particular, pero así es el abuso, así es el atropello. Esta aprehensión es abusiva, abusiva”, declaró.
Con ello se refirió a la excepción constitucional que se aplica para los casos de expresidentes, quienes deben ser juzgados mediante un juicio de responsabilidades y no por la vía ordinaria, como ocurre en este caso.
Insistió en que fue “una aprehensión ilegal, sin previo aviso» y cuando fue consultada sobre el supuesto golpe de Estado, recordó que ella asumió la Presidencia ante la cadena de renuncias que dejaron al país en la ingobernabilidad. “Eso no tiene ni pies ni cabeza”, complementó.
Áñez fue aprehendida la madrugada de este sábado en Trinidad y trasladada a La Paz, luego de un intenso operativo policial, efectuado en la víspera, por el caso «golpe de Estado».
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, y el comandante general de la Policía, Jhonny Aguilera, dirigieron el operativo.
La Fiscalía emitió una orden de aprehensión en contra de Añez y sus ministros Arturo Murillo, Yerko Núñez, Álvaro Coímbra, Fernando López y Rodrigo Guzmán, en el marco de la investigación por el denominado caso «golpe de Estado» del año 2019.
Coímbra y Guzmán fueron aprehendidos antes que Áñez y también fueron trasladados a La Paz.
