La Policía Boliviana aprehendió este martes a un cuarto miembro de la denominada Resistencia Juvenil Cochala (RJC), identificado como Fabio Bascopé, para que dé su declaración informativa por destrozos registrados el 6 de octubre de 2020 en el edificio de la Fiscalía General del Estado (FGE) de la ciudad de Sucre, capital del departamento de Chuquisaca.
Según una nota publicada por el periódico Correo del Sur, el sindicado fue trasladado cerca del medio día desde Cochabamba a dependencias del Ministerio Público.
Un video que circula por redes sociales muestra a Bascopé en el asiento del conductor de un vehículo, quien habla con un efectivo policial sobre una orden de aprehensión emitida en su contra.
El miembro de la RJC menciona que llegó a la ciudad de Sucre para presentarse ante el Ministerio Público, mientras pide que se le muestre el documento sobre su aprehensión.
“Voy a decir que la traigan entonces (la orden de aprehensión)”, menciona el policía en el inicio de una llamada telefónica respecto a la solicitud de Bascopé.
Entre tanto, el miembro de la RJC dice que está dispuesto a prestar su declaración informativa por el caso de los destrozos registrados el año pasado.
“He venido para dar la cara. Acá estoy con todos los papeles, la familia, todo. Hemos venido justamente por eso. No me estoy escondiendo”, asevera en el audiovisual.
Según datos de los medios de comunicación, la investigación del caso permitió hasta el momento que el líder de la RJC, Yassir Molina, y Mario Bascopé cumplan una detención preventiva en el penal de San Roque de la ciudad de Sucre.
Por otro lado, Milena Soto fue beneficiada con una detención domiciliaria que cumple en la ciudad de Cochabamba.
Los sindicados fueron imputados por la comisión de los delitos de organización criminal, deterioro de los bienes del Estado y tenencia ilegal de armas.