La Asociación de Bancos Privados de Bolivia (ASOBAN), a través de su informe trimestral resalta la solvencia y fortaleza del sector bancario del país, gozando éste de buena salud.
Entre otros, el reporte de ASOBAN resalta que Bolivia mantiene niveles históricamente altos de profundización financiera del sector bancario, destacando el acceso de la población a cuentas y cajas de ahorros; a marzo de 2022 las cuentas de depósitos superaron los 12.7 millones, dando cuenta de los avances impulsados por la Banca en materia de acceso a servicios financieros.
En Bolivia, las cuentas de depósito crecieron 8,3%, que equivale a más de 970 mil nuevas cuentas en el último año.
Durante los últimos 12 meses, se registró un incremento de aproximadamente 95.000 nuevos prestatarios, el mayor registrado en los últimos años. “El aumento continuo permitirá que se incremente la inclusión financiera, principalmente a través del acceso a créditos, cuyos efectos son positivos para la reactivación económica de las familias y empresas del país” señala el reporte de ASOBAN.
Solvencia de la Banca boliviana
“La solvencia del sistema bancario, medida a través del Coeficiente de Adecuación Patrimonial (CAP) se mantiene por encima del nivel establecido por la normativa (10%), constituyéndose en uno de los principales indicadores del sistema. A marzo de 2022, el CAP de los bancos múltiples se situó en 12,0% y en al caso de los bancos pyme en 11,3%”, según el reporte.
ASOBAN señala que, al primer trimestre del año, el patrimonio del sistema bancario se situó en $us2.689 millones, anotando un crecimiento interanual de 7,1%, equivalente a $us179 millones, resultado que refleja la continua reinversión de utilidades que a su vez se constituye en el elemento principal para sostener el crecimiento de la cartera de créditos.
La rentabilidad de la Banca del país
Otro aspecto que resalta el informe trimestral es la Rentabilidad respecto al Patrimonio (ROE) que en el sistema bancario se situó en 7,1% a marzo de 2022; 7,3% en el caso de bancos múltiples y -0,3% en el caso de bancos pyme, evidenciando un incremento en comparación con el cierre de 2021.
El desempeño de los indicadores de rentabilidad dependerá en los próximos meses de varios factores, entre ellos, la situación de las operaciones reprogramadas y/o refinanciadas. “Su evolución también dependerá del comportamiento de las tasas de interés y su efecto en el margen financiero”, señala el reporte.