Este lunes, el Ministro de Salud, Jeyson Auza, informó que se descarta la posibilidad de restringir o cerrar las fronteras del país a causa de la viruela símica, puesto que ésta no sería una enfermedad de fácil contagio.
“Al ser una enfermedad que, en su descripción clásica, no es de fácil contagio como la COVID-19, sino requiere de un contacto más estrecho, instancias internacionales no recomiendan un cierre de fronteras o algo parecido”, explicó la autoridad en una nota de prensa del Ministerio de Salud.
Asimismo, Auza señaló que se aguarda los diagnósticos del Centro Nacional de Enfermedades Tropicales (Cenetrop) sobre los dos casos sospechosos de viruela del mono detectados en Santa Cruz.
«Cenetrop realizó 26 pruebas de laboratorio para descartar los diagnósticos diferenciales que se plantean en este tipo de casos, todas resultaron negativas; por lo que las dos muestras (de casos sospechosos) fueron enviadas a Argentina para que se realice el examen viral», dicta un informe del Ministerio de Salud..
El ministro agregó que, mediante la Dirección Nacional de Epidemiología con apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), se hicieron contactos con el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Atlanta, Estados Unidos, para que en las próximas semanas envíen al país kits de diagnóstico de esa enfermedad.
Auza reiteró que se mantienen las medidas de bioseguridad para la COVID-19 que, al mismo tiempo, servirían también para proteger a la población de una serie de enfermedades.
La transmisión de la viruela del mono de persona a persona puede producirse por contacto estrecho con secreciones infectadas de las vías respiratorias o lesiones cutáneas de una persona infectada, o con objetos contaminados recientemente con los fluidos del paciente o materiales de la lesión.