El ministro de Justicia, Iván Lima, informó este lunes que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) visita Bolivia para reunirse con altas autoridades del órgano judicial y con las “víctimas de Senkata y Sacaba”, en el marco de la Mesa de Seguimiento a las Recomendaciones del Informe del GIEI (MESEG),
“La delegación ha empezado a llegar desde hoy (lunes), y estará haciendo su trabajo el miércoles y jueves, se reunirá con las víctimas de Sacaba y Senkata, con el fiscal General del Estado (Juan Lanchipa), el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (Ricardo Torres) y también atenderá a los medios de comunicación y a la sociedad civil boliviana”, dijo, en rueda de prensa.
El informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) tiene una serie de recomendaciones de mediano y largo plazo que tienen que ser evaluadas por la Mesa de Seguimiento, que como país está conformada junto a la CIDH, para investigar “los hechos de violencia y muerte ocurridos antes, durante y después de la crisis de 2019”.
La delegación estará liderada por el Comisionado Relator de país, José Luis Caballero, y llevará a cabo reuniones de alto nivel con el objetivo de presentar el primer informe de la MESEG y socializar sus hallazgos respecto de los avances, retos y desafíos en el cumplimiento de las recomendaciones del GIEI.
“Se evaluará los avances y la manera de mejorar nuestro trabajo de protección y atención a las víctimas. Viene a evaluar el primer año y a planificar el segundo”, agregó Lima.
El GIEI elaboró un informe con 36 recomendaciones; en el punto 10 señala que se debe “garantizar la imprescriptibilidad y la inaplicabilidad de normas de amnistía en casos de graves violaciones de los derechos humanos”, como habría ocurrido en “las masacres de Senkata y Sacaba que dejaron más de una veintena de muertos”.
Desde su conformación, la MESEG sostiene una agenda de reuniones permanente con el Estado, organizaciones de la sociedad civil y asociaciones de víctimas, con la finalidad de recoger información sobre la implementación de las recomendaciones del GIEI, a través de un diálogo directo con los distintos actores.