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sábado, 5 de octubre de 2024
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David Pérez Hidalgo, el ‘camba-colla’ que ama, entre muchas cosas, los libros y la fotografía antigua

"Los jóvenes que lean todo lo que caiga en sus manos porque todo lo que leemos y aprendemos,  en algún momento de la vida lo aplicamos y  nos sirve".

El presidente de la Cámara Departamental del Libro de La Paz, David Pérez Hidalgo, accedió a contarnos aspectos más íntimos sobre su vida, su familia, su formación y sus intereses. Todo esto en la víspera del final de la Feria Internacional del Libro de La Paz (FIL), que este domingo cerró sus puertas tras una semana de febril trabajo.

T-Informas: Hablemos un poco sobre su infancia y juventud ¿A qué se dedicaban sus padres?

David Pérez: Mi papá era un cruceño que llegó acá poco antes de que yo naciera. Era un cruceño enamorado de La Paz, tanto que fue parte del directorio del club Bolívar,  casi desde que llegó hasta que falleció. Entonces también soy muy bolivarista. Y bueno, yo me considero colla-camba, porque tengo 50% de sangre cruceña, cosa que disfruto. Y creo que los bolivianos somos así, una mezcla de culturas.  

Mi mamá, ama de casa.  Pero ambos, muy amantes de la lectura. Entonces ellos, desde que yo era  muy chiquitito, me han fomentado la lectura y la cultura.  Mi mamá me llevaba a las galerías de arte, a las librerías,  a las exposiciones, que eran muy pocas, Eso me ha permitido tener, por ejemplo, los catálogos de todos estos eventos culturales, y  que ahora son una base de datos que sirven desde los años 70’. Entonces he tenido una infancia,  en ese sentido, muy grata. He leído mucho, en mi casa había mucho periódico, habían muchas revistas, muchos libros. Y eso me ha permitido acercarme a los libros.

Y bueno, creo que el resultado de todo eso es que, ahora estoy, sin querer queriendo, como Presidente de la Cámara del Libro. 

TIN: ¿Cuándo comenzó a interesarse por ser escritor y, especialmente, poeta? ¿Qué personas le influyeron en ello?

D.P.: Siempre me ha gustado leer, me ha gustado escribir, he publicado artículos en los últimos años en la revista Jiwaki, de la Alcaldía,  en las revistas dominicales de Página7, Entonces, yo creo que el libro físico, más que el libro digital, es un gran vehículo: no es solo un objeto que puedes comprar y vender; sino, es un gran vehículo de  conocimiento de transmisión, de transmisión de conocimientos, de culturas. Leyendo, tú puedes aprender mucho. No solo el contenido, sino que puedes transmitir ideas, además, mejoras tu vocabulario, mejoras tu conocimiento de todo, mejoras tu forma de escribir, tu ortografía. Porque de tanto leer se te fijan las palabras y entonces, automáticamente, escribes mejor. Creo en el libro como algo. como un objeto más allá de su valor comercial, es un transmisor de conocimientos, o sea amo el libro.

Es una consecuencia lógica Si ves que en tu casa leen, o sea hay que predicar con el ejemplo, entonces leer y escribir es una consecuencia de haber visto de que  en mi casa si se leía mucho. Entonces yo guardo con mucho cariño los libros que me han regalado cuando tenía cinco, seis, siete años y los tengo todavía. Que me regalaron mi mamá mi papá mi tía. Entonces, yo creo que tiene que ver, también, la formación que hay en los colegios. Si en el colegio te incentivan a leer, lógicamente lo vas a repetir a lo largo de la vida. Y ya depende de cada uno, luego, si encuentras algo que disfrutas hay que tratar de seguir haciéndolo, de fomentarlo.

TIN:  ¿A quienes considera como sus maestros? ¿A quiénes admira en la actualidad?

D.P.: Maestros no, personas, Yo creo que pues muchas, empezando de mi casa. Mis padres, mi tía, mi abuela, que son importantes en mi formación. Pero así, maestros, no. Admiro a cualquiera que se dedique a hacer lo que disfruta, y que lo haga con pasión. porque en realidad así es como se deberían hacer las cosas. 

TIN: ¿Cuáles son sus intereses, tiene  autores u obras literarias preferidas? 

D.P.: En la literatura, en el arte, muchísimos. En realidad a mí no solo me gusta el libro, me gusta la cultura en general, me interesa mucho la fotografía antigua, me interesa mucho la arquitectura, me interesa mucho todo lo relacionado con mi ciudad, con La Paz, me interesa la pintura, que afortunadamente he tenido oportunidad de ‘apropiarme’ de toda esa cultura que nos rodea. Entonces ahora estoy en algo que es lo contrario, que es la difusión de todo eso que he acumulado a lo largo de los años. Tengo un grupo de Facebook dónde tengo casi 200.000 seguidores con el tema de fotografía antigua de La Paz que me interesa mucho porque allí confluye la fotografía, confluye la historia de La Paz confluye la arquitectura. Entonces, disfruto mucho. Todo lo que tiene que ver con la cultura y con la gestión cultural.. 

Sobre los libros  que han marcado mi vida en momentos importantes,  uno es Demian, de Hermann Hesse. Es un libro escrito más o menos hace 100 años y que ha sido escrito a pedido del gobierno alemán. Hermann Hesse  escribió esto para que ayude a la juventud alemana a seguir, tras la Primera Guerra Mundial. Entonces es un libro muy motivador. Y el otro, es un libro que  se llama Lazos de Amor, de Bryan Weiss -que es un psiquiatra estadounidense- que  te ayuda a entender muchas cosas que pasan en la vida, te ayuda a entender por qué pasan ciertas cosas, incluso las más trágicas que podamos considerar,. Te ayuda a entender por qué hay ciertas personas que aparecen en tu vida por un momento. Entonces, esos son dos libros muy importantes que tienen que ver con fotografía antigua; y qué tienen que ver con dos libros que estoy haciendo.

TIN: ¿Quiere enviarle algún mensaje a los jóvenes?

D.P.: Los jóvenes que lean todo lo que caiga en sus manos porque, todo lo que leemos y aprendemos,  en algún momento de la vida lo aplicamos y  nos sirve. Lean absolutamente todo.