La Defensoría del Pueblo solicitó al Ministerio de Gobierno declarar emergencia sanitaria en el centro penitenciario de Palmasola para evitar la propagación de casos de COVID-19, ante el rebrote del virus en el departamento de Santa Cruz.
La Defensora del Pueblo, Nadya Cruz, expresó su preocupación por la situación de las poblaciones altamente vulnerables que se encuentran en los penales durante una reunión que sostuvo con representantes del penal cruceño, Régimen Penitenciario, SEDES Santa Cruz y Red de Salud del Sur dependiente del Gobierno Municipal.
La reunión se llevó adelante para coordinar la implementación de medidas de prevención en este recinto. Según datos proporcionados por el Ministerio de Salud, en Palmasola existen 72 enfermos crónicos, 68 con VIH y 114 personas adultas mayores, cuya salud se encuentra en riesgo debido al coronavirus.
En el encuentro, también se conoció que el Hospital San Juan de Dios niega la atención en salud a casi 90% de las personas privadas de libertad y personal policial que trabaja en los centros penitenciarios.
Ante los riesgos inminentes y la falta de atención médica urgente, Cruz planteó la necesidad de realizar diagnósticos por especialidades para que los infectados o enfermos sean evacuados cuando corresponda. Exigió que las medidas de bioseguridad en ese penal sean maximizadas y advirtió que no se puede exigir a las visitas que porten una prueba rápida, ya que los familiares no cuentan con los recursos necesarios para ello, según una nota de prensa de la institución.
La autoridad defensorial también demandó que en el marco de la pandemia por la COVID-19 las salidas médicas de las personas privadas de libertad deben ser diligenciadas sin una orden judicial con base al derecho a la vida y salud por su carácter de urgencia y emergencia sanitaria.
Asimismo, insistió en la posibilidad de una salida del penal con medidas sustitutivas en favor de las personas privadas de libertad, dado el rebrote del virus de la COVID-19.
La primera ola de la pandemia en el penal de Palmasola dejó 14 fallecidos y 69 casos positivos. Este 15 de diciembre, la Gobernación de Santa Cruz declaró emergencia sanitaria por el rebrote de casos de COVID-19 en esa región.
