El excomandante general de la Policía, Rodolfo Montero, fue enviado este miércoles con detención preventiva en la cárcel de San Pedro, por el lapso de seis meses, dentro de las investigaciones por los hechos luctuosos de Senkata, El Alto, en noviembre de 2019.
En la víspera, el excomandante prestó su declaración en la Fiscalía de la ciudad de La Paz, y posteriormente se determinó su aprehensión y fue conducido a instancias policiales por estar implicado en los hechos luctuosos de noviembre de 2019.
Montero fue comandante de la Policía Boliviana desde el 14 de noviembre de 2019, durante el Gobierno transitorio de Jeanine Áñez.
Los delitos que pesan contra Montero, son genocidio, homicidio y lesiones graves.