En Bolivia, el COVID-19 golpeó más a los adultos mayores y personas con enfermedad de base, pues el 65% de los fallecidos tenía más de 60 años o sufría hipertensión, diabetes u obesidad, según los últimos informes del Ministerio de Salud.
“Cuando se estableció la cuarentena rígida (22 de marzo), una de las principales recomendaciones fue que los mayores de 60 años y las personas con enfermedades de base no salgan de sus casas porque el COVID-19 es más peligroso para esta población, pero nuestros datos de letalidad indican que el 65% de decesos corresponde a esos grupos”, indicó a T-Informas el jefe nacional de Epidemiología, Virgilio Prieto.
El país registró hasta el 8 de octubre un total de 137.969 contagiados con el nuevo coronavirus, de los cuales 8.228 perdieron la vida (5,9% de letalidad). De esta última cifra, 5.348 tenían más de 60 años o padecía de hipertensión, diabetes, obesidad o enfermedades relacionadas con la obstrucción pulmonar.
Prieto especificó que la mayoría de las personas con enfermedad de base que fallecieron por el nuevo coronavirus tenía hipertensión, que se da cuando los vasos sanguíneos tienen tensión alta persistentemente. “Es una enfermedad silenciosa y peligrosa, hay mucha gente que no sabe que lo tiene porque no acostumbra a realizarse exámenes completos cada año”.
