El Día Internacional del Jazz se celebró este viernes en todos los países del mundo. Esta fecha fue establecida hace 10 años por la Unesco con el fin de que este género musical pueda ser visibilizado.
Por medio de saxófonos, pianos, guitarras, vibratófonos, contrabajos y baterías, el jazz une nuevamente a instituciones, músicos, historiadores y fans alrededor del mundo para promover este arte y sus raíces.
Fue en Nueva Orleans, gracias a la gran comunidad de esclavos procedentes de África, el lugar donde el jazz tuvo su origen a partir de una fusión de razas, culturas y tradiciones. Congo Square, la plaza de esta ciudad, era el lugar de encuentro de los esclavos, que improvisando con tambores y otros instrumentos entonaban canciones y ritmos de las islas del Caribe que se mezclaban con cantos de trabajo, danzas rituales y música religiosa. Una mezcla que crearía un nuevo tipo de música y que terminaría siendo la semilla del jazz en la actualidad.
Su música evolucionó pasando por diferentes estilos, incorporando nuevos instrumentos. Dixieland, ragtime, swing, bebop, cool jazz, hard bop, funky, soul jazz, free jazz, son algunos de los estilos que muestran los cambios de este arte. Más tarde, el jazz se encontró con otras culturas musicales, lo que dio origen al jazz fusión: jazz rock, jazz flamenco o jazz afrocubano, demuestran esta evolución.
Música primordialmente popular y de calle, la presentación en vivo es el medio natural del jazz, recurriendo solamente a la improvisación, sin partituras. Por lo que muchas de sus manifestaciones resultan efímeras. Es posible asegurar, en este Día internacional del Jazz 2021, que esta manifestación musical aún se encuentra vigente y que su carácter intergeneracional podrá garantizar la trascendencia de esta música que supera fronteras y razas.
