Las diez represas de La Paz y El Alto tienen acumulados 42 millones de metros cúbicos (MMC) de agua y garantizan el suministro del recurso hídrico para ambas ciudades, informó este miércoles el interventor de la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas), Bladimir Iraizos.
Además, el funcionario denunció que algunos dirigentes de las comunidades ubicadas en las fuentes de agua amenazan con cerrar válvulas en busca de réditos.
“Tenemos 42 millones de metros cúbicos almacenado y falta 10 millones, pero con esto vamos a salir este 2023”, dijo Iraizos. Y agregó que esto se debe a que la represa de Milluni, que suministra el recurso hídrico a la urbe alteña, almacenó sólo 59% de su capacidad.
Asimismo, el interventor aseguró que el número de conexiones clandestinas se redujo lo que permitió un ahorro de casi 2 MCM de agua potable.
“El agua no facturada era 28% y ahora solo 25,5%. Debido al cambiado de válvulas, notificado de ‘lavaderos’, notificado construcciones, hay un cambio de normativa, se regularizan conexiones clandestinas y las medidas de concientización tiene efecto”, dijo.
Por último, Iraizos denunció “una mala actitud” de algunos dirigentes de comunidades ubicadas en las fuentes de agua que estarían amenazando con “cerrar valvular queriendo sacar rédito”.
En ese sentido, el funcionario afirmó que, en el marco de convenios vigentes, Epsas otorga algunos beneficios a estas comunidades, sin embargo, algunos dirigentes “quieren extorsionar y no me parece”, indicó.