La declaratoria peruana de “Patrimonio Cultural” para el baile de la Morenada ha generado malestar en Bolivia, donde las autoridades locales y nacionales ya piensan en tomar algún tipo de acción para reclamar por ello.
Pero el vecino país tiene sus argumentos para haber tomado esta determinación y aquí conocemos algunos de ellos.
Una resolución viceministerial aprobada en Perú resolvió este 7 de mayo declarar como “Patrimonio Cultural de la Nación a la danza Morenada, Rey Moreno y Rey Caporal del departamento de Puno”, a solicitud de la presidenta del Conjunto Folklórico Confraternidad Morenada Orkopata, que además fue respaldada por otros conjuntos y agrupaciones del lugar.
La determinación afirma que: “la ‘Morenada puneña’ es una expresión coreográfica de carácter tradicional, propia del altiplano peruano…”. Además, declara que las características particulares, la indumentaria y los atributos de los danzarines, como también la rítmica de sus desplazamientos, permite diferenciarla de otras danzas de ‘negrerías’ y ‘morenadas’ en el mundo andino, dentro y fuera de su país.
Asimismo, el documento refiere que el origen del término moreno y sus usos se habrían tomado como referencia el vocabulario elaborado por el jesuita Ludovico Bertonio, donde aparecería el término ‘moreno etíope’ y su traducción en el habla aimara (‘yanaruna nigro’). El término es el que la población indígena habría utilizado para referirse a los ‘herejes’ musulmanes y a los esclavos africanos establecidos en la región.
Luego, la resolución señala que, según fuentes documentales de finales del siglo XIX e inicios del siglo XX, la danza de morenos en el altiplano peruano estaría asociada a la presencia del ‘moreno’ en las comparsas de sikuris que existían en Puno y en otras localidades circundantes durante las fiestas religiosas.
A causa de esta declaración, el alcalde La Paz, Iván Arías, envió este lunes una carta al canciller Rogelio Mayta, en la que solicita “aunar esfuerzos” para defender el origen boliviano de las danzas de la Morenada y el Caporal, pues el país contaría con una vasta referencia literaria para sostener y afirmar el origen boliviano de estas expresiones culturales.
Para Arias, la decisión asumida por el Perú es una ‘ofensa’ para los paceños. Por su parte, la Secretaría Municipal de Culturas gestiona un equipo de defensa que se armará con todos los documentos referentes a la propiedad legal e histórica.
