Luego de que varias autoridades de Gobierno lanzaran advertencias en contra de la marcha denominada “para salvar Bolivia”, el expresidente Evo Morales anunció que abandonará la movilización y la dejarán en manos del “estado mayor de pueblo”
Según Morales, su decisión fue tomada para evitar que el Gobierno de Luis Arce deje de criticar la marcha, ya que asegura que se trata de “una marcha del pueblo” y no suya.
“La marcha no es del Evo, (…) como tanto satanizan, penalizan, criminalizan a Evo, he decidido, después de esta jornada, retirarme de la marcha”, manifestó.
Asimismo, advirtió que el Gobierno no podrá detener “al pueblo” incluso si buscan “procesarlo”
“Pueden procesarme, pueden hacerlo. Al Evo pueden meter a la cárcel, al Evo pueden matarlo con amenaza, pero a este pueblo no van derrotar, no van a neutralizar”, aseguró.
Por fin una decisión coherente