A una semana de estar internado en terapia intensiva y tras una cirugía con lo que luchó por su vida, la madrugada del domingo falleció el niño que, junto con su hermana y su madre, fue quemado por su padrastro en Warnes, Santa Cruz.
El menor tenía comprometido más del 80% de su cuerpo con quemaduras, luego de que Félix Fernández, la expareja de su madre, roció a la familia con gasolina mientras dormían y les prendió fuego, dejándolos encerrados en una habitación.
“El (niño) falleció también. Donde velamos a su mamá y a su hermanita, ahí le vamos a llevar”, confirmó entre lágrimas una de sus familiares, en entrevista con Bolivia Tv.
El menor fue sometido a una cirugía mediante la cual le amputaron los dedos de las manos y pies. Sin embargo, pese al esfuerzo de los médicos, no resistió el proceso de recuperación y falleció esta madrugada.
Su madre y su pequeña hermana fallecieron días atrás como consecuencias de las graves quemaduras.
Además, el sábado fue encontrado el cuerpo sin vida de Félix Fernández, quien era buscado por los delitos de feminicidio e infanticidio. El sujeto se habría quitado la vida, pero la familia de las víctimas duda de que el cuerpo sin vida pertenezca al victimario y ahora piden una prueba de ADN.
