Fiscalía inició audiencia de los acusados de maltratar menores en una guardería de Santa Cruz

0
115

Este martes, la directora de la guardería ‘Garden House’, Romy A. A., su esposo Diego Ch. O. y las niñeras Lucía C. P., Josefina A. C. y Brenda M. S., enfrentan su audiencia de medidas cautelares, quienes son acusados por los delitos de lesiones graves y gravísimas y atentado contra la salud pública por presuntos tratos inhumanos a niños y niñas.

En tanto, el Ministerio Público fundamentará su acusación y pedirá que los imputados sean enviados a la cárcel de Palmasola con detención preventiva, mientras duren las investigaciones.

Los padres y madres de familia se mantienen en vigilia a la espera que las presuntas agresoras sean sancionadas por el daño que habrían causado en los infantes y, además, piden la clausura definitiva de la Guardería ‘Garden House’, ubicada en pleno centro cruceño.

Según las investigaciones preliminares, los castigos en contra de los infantes se daban en un cuarto oscuro, con inmovilizaciones con cinta adhesiva, golpe, zarandeos, maltrato psicológico y otros hechos que pesan en contra de las educadoras y los administradores de la guardería.

Las ‘educadoras’ ingresaron a la audiencia Enmanilladas y con la mitad del rostro cubierto ingresaron a su audiencia las “educadoras” a quienes los niños y niñas llamaban “tías”, sin embargo, resultaron ser sus maltratadoras, según develó la investigación que realizó la Fiscalía y la Defensoría de la Niñez y la Adolescencia en Santa Cruz de la Sierra.

El Ministerio Público ahora fundamenta su acusación y pide que los imputados sean enviados a la cárcel de Palmasola con detención preventiva, mientras duren las investigaciones.

Los padres y madres de familia se mantienen en vigilia a la espera que las presuntas agresoras sean sancionadas por el daño que causaron en los infantes y piden la clausura definitiva de la Guardería Garden House, ubicada en pleno centro cruceño.

Los castigos en contra de los infantes se daban en un cuarto oscuro, con inmovilizaciones con cinta adhesiva, golpe, zarandeos, maltrato psicológico y otros hechos pesan en contra de las presuntas educadoras y los administradores de la guardería.