El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, denunció este lunes que el exministro de Defensa, Luis Fernando López, tenía planificado contratar a mercenarios y paramilitares internacionales para acabar con la vida del presidente Luis Arce Catacora antes que asuma su mandato.
Una investigación de la revista The Intercept, de EEUU, reveló este año que Bolivia estuvo al borde de un golpe de Estado y una invasión armada de mercenarios estadounidenses tras la victoria electoral del presidente Luis Arce en octubre de 2020, informó Del Castillo en conferencia de prensa en La Paz.
Al respecto, el Gobierno nacional mostró a audios, modelos de contratos y correos electrónicos interceptados que atribuyen al exministro de Defensa de Jeanine Áñez, Fernando López, con el plan de desestabilización, aclaró.

Puso como ejemplo el nombre de German Rivera García, quien estuvo en Bolivia en octubre de 2020 y luego estuvo involucrado en el magnicidio del presidente de Haití, Jovenel Moïse. Hizo mención de otros involucrados como Enrico Galindo Arias, Ronal Ramírez Salamanca, Sam Brown, Ernest H. DeLong, Davion Covell Hart, Joe Pereira y Arcángel Pretel Ortiz, quien fue enlace de la denominada empresa de seguridad CTU (o por sus siglas en inglés Counter Terrorist Unit Federal Academy), con sede en Miami y dirigida por el opositor venezolano, Antonio Emanuel Intriago Valera.
“No es coincidencia que quien ahora está detenido en Haití, por haber participado en el asesinato del presidente de ese país, haya estado en Bolivia días previos y posteriores a las elecciones del señor Luis Arce y que el señor Fernando López, que fue una cuota de poder de Luis Fernando Camacho durante el gobierno de Jeanine Añez, haya tenido contactos constantes con estos grupos irregulares y paramilitares mediante empresas tercerizadoras con experiencia en combate como Irak y Afganistán”, sostuvo Del Castillo.