La Copa América 2021 sufrió un duro revés este domingo al confirmarse que Argentina no podrá organizarla debido a la pandemia del coronavirus, a solo dos semanas de la inauguración prevista para el 13 de junio.
“La CONMEBOL informa que en atención a las circunstancias presentes ha resuelto suspender la organización de la Copa América en Argentina. La CONMEBOL analiza la oferta de otros países que mostraron interés en albergar el torneo continental”, comunicó la entidad del fútbol sudamericano en Twitter.
“En la brevedad se anunciarán novedades en este sentido”, agregó.
El pronunciamiento de la Conmebol se dio minutos después de que el ministro del Interior argentino, Eduardo De Pedro, afirmara que su Gobierno había considerado que era “muy difícil” que la Copa América se juegue en Argentina.
En declaraciones a la televisión, la autoridad advirtió que el presidente argentino Alberto Fernández quiere ser “coherente” con el objetivo de “cuidar la salud y vida de los argentinos, teniendo en cuenta que hay nuevas cepas” de la pandemia.
La agencia Télam había adelantado que la decisión iba a ser tomada el lunes y comunicada a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
“En declaraciones al canal de televisión C5N, De Pedro señaló que conversó con el Presidente acerca de la ‘situación sanitaria de las distintas jurisdicciones y, en particular, sobre la situación epidemiológica de Mendoza, Córdoba, Ciudad de Buenos Aires, Tucumán y Santa Fe’, que en algunos casos son sede del torneo, y añadió que el mandatario tomará este lunes la decisión que corresponda junto al Ministerio de Salud”, había informado la agencia argentina de noticias.
“Vemos muy difícil que se pueda jugar la Copa América en Argentina”, anticipó el ministro.
La Conmebol reaccionó de inmediato dando cuenta de que también le retiraba la sede a Argentina, así como ya lo había hecho con Colombia.
El certamen debía llevarse a cabo por primera vez en dos países. En el caso de Colombia lo impidió la crisis social y política.
La Conmebol esperaba que Argentina asumiera todo el certamen.
Esta edición de la Copa fue programada para jugarse originalmente en 2020, pero fue suspendida por la pandemia.
Durante la semana trascendió que el torneo podría ser llevado a Estados Unidos, una medida descartada.
En cambio, surgieron candidaturas de otros países como Chile y Ecuador para ser sede. La Conmebol definirá este lunes el futuro del torneo más antiguo del mundo.