El caso del fraude electoral está lejos de terminar. La Fiscalía de Bolivia decidió acudir, con recursos propios, a una empresa europea para que realice una nueva pericia informática de los resultados de las anuladas elecciones del 20 octubre de 2019.
El fin es tener certeza de los hechos denunciados, informó el fiscal general Juan Lanchipa.
“El Ministerio Público, por cuenta propia, ha logrado tomar contacto con una empresa y, con los pocos recursos que tenemos, vamos a lograr cubrir los gastos que demande la pericia informática internacional”.
El caso tiene base en el informe de auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA), que halló graves indicios de irregularidades en el sistema de cómputo de los votos.
Lanchipa indicó que la Fiscalía asumió esa decisión porque debe tener datos técnicos para contrastarlos con la información presentada por ese documento.
“Tenemos la posición de varios expertos nacionales e internacionales, pero como Ministerio Público tenemos que tener la certeza para presentar la situación real de lo que aconteció en todo el manejo informático en las elecciones pasadas”, sostuvo.