La retirada de Kazajistán de las fuerzas de paz de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) comenzó el 13 de enero después de haber entregado la custodia de infraestructuras vitales a las fuerzas de seguridad nacionales.
La OTSC, una organización compuesta por Armenia, Bielorrusia, Kirguistán, Rusia, Tayikistán y Kazajistán, envió el 6 de enero un contingente de paz a este último país después de que el presidente kazajo Kasim-Yomart Tokaev pidiera ayuda para hacer frente a los graves disturbios a los que calificó como «ataques terroristas».
Así se desplazó un contingente de paz compuesto por 2.030 personas con el objetivo de proteger las instalaciones estatales, militares y de importancia social hasta que la situación se estabilice en el país. Ahora que el Gobierno y las fuerzas de seguridad kazajas tomaron el control del país, el contingente de paz de la OTSC entregó la custodia de las infraestructuras vitales e inició su retirada.
El ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, informó que el 19 de enero se transportarán a las fuerzas de paz de los países de Armenia, Tayikistán y Bielorrusia en 14 aviones. Mientras que las tropas de Kirguistán retornarán a su país independientemente debido a la cercanía territorial que hay con Kazajistán.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, destacó el papel importante que las fuerzas de paz de la OTSC desempeñaron en la resolución de la situación en Kazajistán. Al finalizar la misión de paz del contingente, el presidente kazajo, Tokaev, agradeció a Rusia por ser un socio estratégico y aliado de la OTSC.
