Tras el derrame de crudo en el litoral peruano, el presidente de ese país, Pedro Castillo, anunció que tomará acciones urgentes para sancionar a los responsables de ese daño ecológico.
“El daño ecológico en nuestro litoral es inadmisible. Desde el Estado se han dispuesto las acciones penales, civiles y administrativas, a fin de cautelar la soberanía y bienestar del país”, compartió Castillo en su cuenta de Twitter, luego de su visita a una de las playas más afectadas por el vertido de petróleo.
Asimismo, el jefe de Estado peruano consideró que su país se encuentra ante uno de los ‘ecocidios’ más grandes que se han suscitado en sus costas, por lo que asumirá el rol de sancionar a los responsables que afectaron trágicamente a la flora, fauna y a las comunidades que fueron puestas en peligro, privadas de su sustento diario.
Según el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) de Perú, el petróleo vertido cubrió 1,7 kilómetros cuadrados de playa y 1,2 kilómetros del líquido siguen flotando en la superficie del agua.
Además, el crudo habría afectado a la Zona Reservada Ancón y los Islotes de Pescadores, donde habitan especies legalmente protegidas como el pingüino de Humboldt y la nutria marina.
Medios internacionales relatan que este hecho se produjo luego de que el tsunami, provocado por la erupción volcánica de la isla Tonga, alcanzó el litoral peruano, y afectó a un buque que descargaba el crudo en la Refineria La Pampilla, operada por Repsol.
