La noche de este viernes, siete trabajadores en salud de diferentes ramas, determinaron radicalizar sus medidas de presión y se tapiaron en instalaciones del Hospital de Clínicas, La Paz, hasta que la bancada del MAS trate y viabilice el 10% del Presupuesto de Salud el cual sea destinado para la atención del pueblo boliviano.
El secretario ejecutivo del Sindicato de Ramas Médicas en Salud (Sirmes) La Paz, Fernando Romero, indicó que la determinación de asumir esa medida extrema es porque no encuentran una respuesta a sus demandas por parte de los asambleístas del MAS que no sesionan para tratar esa exigencia.
«La bancada del MAS se opone hace 10 meses ya de tratar el 10% para la salud del pueblo Bolivia 10% que va ayudar a atender a pacientes con cáncer, con hemofilia, con hipertensión y que a la vez es gente muy pobre, gente que tiene mucha necesidad. Es por eso que nos hemos declarado en huelga de hambre seca tapiados hasta las últimas consecuencias», dijo Romero.
La medida fue asumida por siete trabajadores en salud, entre ellos un médico, trabajadoras sociales, miembros de la Iglesia y un docente universitario del sector quienes hace nueve días iniciaron una huelga de hambre.
Además del 10% del presupuesto, exigen la incorporación del sector en la Ley General del Trabajo, el pago de la deuda del Sistema Único de Salud (SUS) y que se les brinde mejores condiciones laborales.