Los ministros de Relaciones Exteriores de Brasil, Carlos França, y de Argentina, Santiago Cafiero, anunciaron que llegaron a un «consenso» sobre la Tarifa Externa Común (TEC) del Mercado Común del Sur (Mercosur), que en los últimos meses alimentó tensiones entre ambos países.
En un comunicado conjunto tras una reunión en Brasilia, los cancilleres afirmaron haber «logrado el consenso necesario para definir en conjunto con los demás socios del Mercosur el alcance y las características de la revisión de la Tarifa Externa Común (TEC)».
En este sentido, estuvieron de acuerdo en trabajar con Paraguay y Uruguay para la pronta aprobación de una decisión del Consejo del Mercado Común que permita «reducir en un 10% las tarifas de la mayor parte del universo arancelario, resguardadas las excepciones ya existentes en el bloque».
Los ministros resaltaron que el acuerdo alcanzado «considera las diferentes necesidades de los países miembros», demostrando la capacidad del Mercosur de avanzar hacia la adaptación de sus tarifas a las condiciones del comercio regional y mundial.
La nota también habla de consolidar el Mercosur como una plataforma conjunta de inserción internacional en un contexto mundial competitivo, «incluso por medio de la negociación de acuerdos extrarregionales, de la mejora del ambiente regulatorio y de la mejora de las reglas de origen».
En la cooperación en materia de energía, Brasil agradeció a Argentina la exportación de electricidad de origen térmica, y ambas partes acordaron profundizar las conversaciones sobre la venta de gas argentino en el mercado brasileño.
También pactaron convocar la comisión técnica sobre el proyecto hidroeléctrico binacional del Garabi, en la parte compartida del río Uruguay, y retomar el dialogo para la construcción de nuevos puentes sobre este río, incluyendo la travesía entre Porto Xavier y San Javier.
Además, buscarán continuar las negociaciones para que Argentina pueda comprar vehículos blindados Guaraní, fabricados con piezas producidas en los dos países.
Finalmente, los dos cancilleres instruyeron a sus respectivos ministerios que realicen una reunión de trabajo en noviembre para revisar estos y otros temas de la agenda política bilateral, para organizar un plan de acción de cara al 2022.
