Bajo la dirección del expresidente Evo Morales, las seis federaciones de cocaleros del Trópico de Cochabamba se reunieron este lunes y emitieron un comunicado en el que ratificaron que en 2019 hubo un “golpe de Estado” orquestado por la derecha internacional y se declararon en emergencia nacional.
La decisión fue asumida el mismo día en que se rearticularon en seis capitales de departamento las movilizaciones de sectores contrarios al gobierno, que denuncian una persecución política y exigen la liberación de la expresidenta Jeanine Añez, de sus ministros y de los militares y policías aprehendidos en un proceso por el presunto “golpe”.
“Nos declaramos en estado de emergencia y movilización permanente a nivel regional, departamental y nacional”, señala parte del comunicado emitido al final del encuentro, en el que además se acusa al secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, de ser parte del plan golpista.
“Condenamos la actitud de Luis Almagro, quien fue cómplice de la derecha internacional para gestar el golpe de Estado en Bolivia y provocar la muerte de 36 hermanos en el país, más de 800 heridos y un centenar de perseguidos ilegalmente”, se lee.
Los cocaleros denuncian además que “algunos jerarcas” de la Iglesia Católica asumen acciones de encubrimiento y defensa de los responsables del “golpe” y exigen a la Justicia celeridad para sancionar a los autores de las muertes en 2019.
