Efectivos de la Policía Boliviana trasladaron hasta Riberalta, Beni, a las 38 personas que deben cumplir detención domiciliaria por el caso de explotación ilegal de oro en el río Madre de Dios.
Esta medida se da luego de que la Justicia determinara, el lunes, detención preventiva por cuatro meses, en el penal de Villa Busch de Pando, para 19 de los 57 detenidos por minería ilegal, mientras que 38 deberán cumplir detención domiciliaria por estar vinculados con la actividad ilegal.
Todos ellos fueron aprehendidos el viernes pasado por la Policía Boliviana durante un operativo en las comunidades Candelaria y Miraflores cercanas al río Madre de Dios, donde, además, se destruyeron más de 27 dragas, se secuestró mercurio, combustible, y cuatro armas de fuego.
Las detenciones provocaron protestas en el municipio beniano de Riberalta, cuyos pobladores aseguran que los aprehendidos son solo trabajadores de cooperativas mineras auríferas autorizadas, aunque el Gobierno nacional sostiene que su actividad era ilegal.
La Fiscalía imputó a las 57 personas aprehendidas por los delitos de explotación ilegal de minerales y tenencia, porte y portación ilícita de armas.
