Por una denuncia de incumplimiento de deberes y conducta antieconómica, el exministro de Minería, Luis Alberto Echazú fue aprehendido ayer lunes y conducido a la FELCC; donde expreso que su aprehensión se debe a que cuestionó la presunta paralización del proyecto de industrialización del litio.
“El Gobierno quiere ocultar tres años y medio de paralización del proyecto (del litio)”, pronunció Echazú apenas llegó a celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de La Paz y los medios esperaban.
El abogado de la exautoridad, Vladimir Ochoa, denunció a la prensa que el único delito que se le atribuye a su defendido es el de incumplimiento de deberes. Cuestionó la aprehensión y señaló que el Ministerio Público actuó de forma rápida debido a las denuncias que hizo su defendido con relación al fracaso en la industria del litio, que no sería por su gestión, sino por errores cometidos en el Gobierno de Luis Arce.
Cerca del mediodía de ayer, la Policía ejecutó el mandamiento de aprehensión contra del exministro, por las presuntas irregularidades en la construcción de 18 piscinas de evaporación que generan la materia prima para la planta de carbonato de litio. El Gobierno dijo que existe un daño económico de Bs 425 millones.
Por el mismo caso, habría 10 funcionarios más señalados del cual son parte querellante YLB y la Procuraduría General del Estado.
Echazú ocupo los cargos de viceministro de Minería y Metalurgia (2006-2007), ministro de Minería y Metalurgia (2007-2010), Gerente Nacional de Recursos Evaporíticos de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol, 2010-2017) y viceministro de Altas Tecnologías Energéticas (2017-2019) durante el gobierno de Evo Morales.
Según la defensa, el caso por el que es investigado su cliente es “político” porque habría sido cerrado y posteriormente reabierto.
