El expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, fue extraditado ayer jueves a Estados Unidos para enfrentar cargos por supuesto tráfico de drogas y armamento en un hecho inédito en la historia de Honduras.
Según las autoridades estadounidenses, Hernández participó en una violenta conspiración para permitir que los carteles de droga pudieran enviar miles de kilos de cocaína hacia el país del norte a cambio de pagarle una suma elevadísima de dinero.
El exmandatario habría abusado de su posición para dirigir a su país como un “narco estado” y, además, recibir sobornos de parte de múltiples carteles, incluyendo uno operado por mismo ‘Chapo’ Guzmán.
En contra parte, Hernández ha negado en reiteradas ocasiones las acusaciones y que es inocente; la jornada de ayer publicó un video afirmando que está siendo sometido a un proceso injusto y es víctima de los narcotraficantes que extraditó durante su gobierno.
Juan Orlando Hernández asumió la presidencia de Honduras el año 2014 y ocupó el cargo hasta enero de este año. Solo unos meses después ha sido sacado de la celda en la que estuvo confinado desde el 15 de febrero y fue trasladado en un helicóptero hasta una base militar aérea por agentes de la DEA.