Automática, activa y pasiva, esas son las tres tecnologías que utiliza la Alcaldía de La Paz para medir la contaminación del aire en el municipio paceño y, en función a los datos recogidos, toma decisiones como la realización de Día del Peatón o la reducción del número de unidades del transporte para tener una ciudad más amigable.
“La tecnología automática es la que tiene alta resolución temporal, es decir, tenemos datos de contaminación atmosférica cada media hora, esta tecnología es la mejor, pero nuestro problema es que solo tenemos un punto de monitoreo porque es una tecnología muy cara y de difícil mantenimiento, se requiere técnicos capacitados para el mantenimiento y el tratamiento de datos. Tenemos al menos un punto de monitoreo con la tecnología automática”, informó la responsable de la Red Monitoreo de la Calidad del Aire (Monica), Fátima Gonzales.
El equipo de medición automática se encuentra ubicado en el garaje municipal que está frente al Palacio Consistorial. Este tipo de tecnología permite medir concentraciones de PM10, que es el material particulado que se agrupa en el aire, se mide tanto el dióxido de nitrógeno como el monóxido de carbono.
La otra tecnología utilizada es la pasiva, que se basa en tomar muestras para ser analizadas en laboratorio tras su exposición. Debido a que son 15 puntos instalados por toda la ciudad, la ventaja que tiene esta tecnología es la amplitud del espacio, que permite medir cómo está el aire por zonas de la ciudad. Este método permite evaluar el ozono y el dióxido de nitrógeno.
“Preparamos las muestras, las exponemos y luego las recogemos, para analizarlas en laboratorio. Lo bueno de esta tecnología es que tenemos alta resolución espacial porque está distribuida en toda la ciudad, podemos saber cómo varía la contaminación en la zona Sur y en el Centro, porque varía por el clima, la actividad económica, el tráfico, esa es la ventaja de esta tecnología”, explicó Gonzales.
La desventaja es el tiempo de exposición de las muestras, que es de dos semanas, lo que permite obtener únicamente un dato en ese periodo de tiempo. Sin embargo, la información es de utilidad porque permite determinar el comportamiento del aire en todo el año.
La tercera tecnología que utiliza la municipalidad es la activa, que mide el material particulado y que es el más contaminante y peligroso. Este material se produce, por ejemplo, con el humo negro que sale de los escapes de los vehículos. Para medir la contaminación existen cinco puntos de medición en la ciudad.
Es un material fino y liviano “que no lo podemos ver y se queda flotando bastante tiempo en el aire. Como es liviano se queda y nosotros lo respiramos sin darnos cuenta. Ese humo negro lo compone material particulado y otros gases, los otros gases no están en tan altas concentraciones como lo que es el material particulado”, añadió la autoridad edil.
¿Cómo son los equipos de medición?
Gonzales explicó que los equipos en la tecnología activa consisten en cabezales conectados a una bomba de succión que tiene un flujo determinado. “Este aire que succiona atraviesa un filtro y en el filtro se van depositando las partículas. Entonces, en la tecnología activa nosotros colocamos un filtro limpio previamente pesado en una balanza de alta precisión, se recoge la muestra y luego este filtro se lo lleva al laboratorio y nuevamente se pesa para saber la diferencia de masas y así se tiene la cantidad de partículas que se han retenido en el filtro. Esta tecnología la tenemos en cinco lugares, esta es la activa”.
Para la tecnología pasiva se utilizan tubos de plástico que en su parte superior tiene un filtro remojado en una solución especial. “Esta solución reacciona independientemente con ozono o con dióxido de nitrógeno, preparamos tubos para dióxido de nitrógeno y para ozono, de estos tubos los exponemos en 15 puntos”, añadió.
Este material particulado se concentra en lugares de alto tráfico vehicular, al igual que el dióxido de nitrógeno. Un punto de control es la Terminal de Buses, uno de los lugares de más alta concentración de este material debido a la elevada presencia de vehículos. La otra cara de la medalla, explicó Gonzales, es el Campus de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), donde existe poco movimiento.
“En Cota Cota nos da muy bajas concentraciones de material particulado y también de dióxidos de nitrógeno. Sin embargo, el ozono se comporta al revés, el ozono es menor en áreas de alto tráfico y mayor en áreas alejadas, esto se debe a que el ozono ya es un contaminante secundario, se forma de los contaminantes primarios como el NO2, entonces este tarda en reaccionar con la luz solar y recién se forma en lugares lejanos donde se generan sus contaminantes precursores por así decirlo”, explicó.
¿Para qué sirven estas mediciones?
Toda esta información recopilada a lo largo del año le permite tomar decisiones a la Alcaldía y efectuar recomendaciones a la ciudadanía para cuidar su salud.
Por ejemplo, cada año se realiza el Día del Peatón en septiembre con el fin de darle “un respiro” a la ciudad y bajar los niveles de contaminación. Con los datos recogidos de las mediciones de la calidad del aire se puede implementar más días como estos.
Otra medida es la implementación del transporte masivo para reducir motorizados de menor capacidad de pasajeros y, por ende, evitar altas concentraciones de vehículos.
En el caso del Día del Peatón, el director de Prevención y Control Ambiental de la Secretaría Municipal de Gestión Ambiental (SMGA), Marco Martínez, explicó que lo ideal es realizar este tipo de suspensión de tránsito de vehículos en días de semana con el fin de bajar las concentraciones de material particulado.
“Tenemos que ver de reducir en ciertos días picos de lunes a viernes para bajar las concentraciones. Cuando esta concentración se esté elevando tendríamos que alertarlo. Hay alertas que tienen otras ciudades por sus sistemas de modelación que pueden alertar que en tal fecha subirá la concentración a tal nivel, entonces ese día bajamos (la circulación de vehículos)”, explicó la autoridad.
Con la Red Monica la Alcaldía está en condiciones de prever aumentos de contaminación atmosférica, que dependen de parámetros meteorológicos y del viento.
“Se puede prever por el histórico que tenemos, condiciones meteorológicas, también el chaqueo nos afecta del otro lado y los vientos los traen aquí. Advertimos que va a haber problemas, bajamos el parque automotor cuando nos den concentraciones altas”, añadió la autoridad.
En materia de salud, determinar qué zonas de la ciudad tiene mayor concentración de contaminantes permite definir acciones y recomendaciones que tiendan a evitar que la ciudadanía permanezca en áreas de alto tráfico.
“La población en riesgo son los niños pequeños y los adultos mayores, que no permanezcan en áreas de alto tráfico mucho tiempo para cuidar su salud, esa es la recomendación general”, dijo Gonzales.