En la ciudad de Montero, 140 familias tienen baños ecológicos secos (BES) que permiten reducir la contaminación y aportar con la producción de abono para el cultivo de huertos, como resultado de un programa desarrollado con el apoyo del Gobierno de Suecia a través de su Embajada en Bolivia. Esta experiencia exitosa es transmitida a otros gobiernos municipales con el apoyo de UNICEF, que busca coadyuvar con el saneamiento urbano sostenible descentralizado, el fortalecimiento de la protección a las familias y la adaptación al cambio climático en las comunidades y los municipios.
“¿A quién le importan los retretes? A 3.600 millones de personas. Porque carecen de uno que funcione correctamente”. Es el razonamiento de inicio de la campaña del Día Mundial del Saneamiento 2021, que se celebra cada 19 de noviembre, marcado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con el objetivo de visibilizar que casi la mitad de la población mundial carece de servicios de saneamiento gestionados de forma segura.
Hace algunas semanas a autoridades del Gobierno Municipal de Cobija visitaron Montero, encabezados por la alcaldesa Ana Lucía Reis, con la intención de seguir los mismos pasos. En el intercambio de experiencias, la autoridad expresó su admiración y el deseo de replicar el proyecto en beneficio de los vecinos en Cobija. Visitó a algunas familias que ya cuentan con BES y calificó como “excelente” el proyecto.
No es para menos. Hasta el momento más de 140 familias han mejorado notablemente su calidad de vida en Montero. Una de ellas es la familia de María Luisa Mostajo, una vecina del barrio Guadalupe, que vive junto a su esposo y sus dos hijas. Afirma que la decisión de construir un baño ecológico fue la más acertada para su hogar, pues desde que lo utilizan se acabaron las infecciones intestinales que la letrina de pozo ocasionaba a sus hijas.
Las instalaciones sanitarias dignifican a las familias
“Es lo mejor que pude hacer por mi familia porque cuando teníamos el baño de pozo mis hijas paraban con infección intestinal; cada vez teníamos problemas cuando el pozo se llenaba y ni qué decir del mal olor y las moscas”, manifiesta la madre de familia.
Otro vecino, Fernando Montalván, indica que está muy contento porque ahora tiene un baño ecológico. “Nuestro baño lo hice con mis manos, porque yo soy albañil y no hay cosa más bonita que construir uno sus propias cosas. Agradezco a UNICEF, a la alcaldía y a la embajada de Suecia por esta gran ayuda que nos dan; ahora ahorramos agua, tenemos baños bonitos y no nos enfermamos”, expresa.
UNICEF en coordinación con el Municipio de Montero, la Cooperativa de Servicios Públicos Montero Limitada (COSMOL), la Embajada de Suecia y la Universidad Privada NUR, desarrollan el proyecto “Modelos de saneamiento sostenible en Bolivia”, que comprende la instalación de baños ecológicos y acciones de sensibilización para promover prácticas saludables de higiene y prevención de la desnutrición infantil.
Hugo Rázuri, jefe de Supervivencia y Desarrollo en UNICEF Bolivia, explica que “a través de este proyecto se busca generar un cambio de comportamiento en la población, especialmente en los niños, en relación con sus prácticas de higiene”. El municipio de Montero, ubicado al norte de Santa Cruz, se destaca por ser el primero en tener BES como parte de los servicios ofrecidos por su cooperativa de agua. Estos sanitarios ahorran en consumo de agua y su correcto funcionamiento se basa en la fermentación aeróbica, compostaje y la desecación para degradar la materia fecal, que gracias a un sistema especial permite almacenar por separado la orina y las heces.
Intercambio de experiencias en saneamiento
El alcalde de Montero, Regys Medina, destaca la gran labor y esfuerzo de la cooperativa con ayuda de las instituciones y los vecinos para hacer realidad el proyecto. Además, asegura que su municipio se consolida así en un modelo digno de imitar, “prueba de ello es que la visita de otros municipios para intercambiar experiencias sobre la ejecución del proyecto”.
El funcionamiento de estos baños ecológicos ha convencido de su efectividad a muchos vecinos de Montero, por lo que se espera duplicar la meta inicial de 140 baños. Ese municipio cuenta con una Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos provenientes de los BES y tiene capacidad de procesar los desechos orgánicos de 300 familias. Esta tecnología es inédita en Bolivia y permite el acceso a saneamiento digno, salud, uso y ahorro de agua, prevención de la contaminación y la protección del medio ambiente porque el tratamiento incluye la posibilidad de convertir los desechos en abono.
Desde el punto de vista de la alcaldesa de Cobija, se trata de un proyecto excelente para los vecinos y que beneficia mucho a las familias que no tienen sanitarios adecuados. “Me impresiona ver que tiene la separación de líquido y seco, cada baño cuenta con su ducha, lavamanos y cuenta con el sistema de recojo de agua que sirve para tener su propio jardín. Son baños ecológicos en todo sentido”, manifestó.
Luego de recorrer algunas viviendas y conocer la Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos, Reis aseveró que los pandinos en su mayoría carecen de un buen baño en sus domicilios y este proyecto puede brindar la oportunidad de construir sus propios sanitarios como un trabajo en conjunto con las instituciones que hacen realidad este proyecto. Asimismo, felicitó a los vecinos que tomaron la decisión de adquirir un baño ecológico y sobre todo porque los mantienen en perfecto estado, limpios y muy bien cuidados.
Trabajo conjunto por la salud de la niñez
Sin un buen sistema de acceso a agua segura y saneamiento está en riesgo la salud las niñas y los niños, por tanto, para UNICEF trabajar ambos temas es fundamental para combatir las infecciones estomacales y la desnutrición infantil. Con el lavado de manos, luego de utilizar los baños y/o antes de consumir los alimentos y beber agua segura, se reducen los indicadores de desnutrición y otras enfermedades que aquejan a las familias de escasos recursos sin alcantarillado sanitario en sus domicilios.
Edgar Paniagua, fiscal técnico en Gestión Ambiental y Saneamiento Básico del Programa de Saneamiento Descentralizado Urbano, informa que el proyecto se inició el 2018 con la construcción 60 baños ecológicos y la refacción de otros baños secos existentes en el municipio. Un punto a favor es el trabajo conjunto con la entidad prestadora de servicios de agua y saneamiento en Montero, COSMOL, pues los propietarios de los baños ya no sacan sus residuos por cuenta propia, sino que ahora personal totalmente calificado es el encargado de recoger los despojos y trasladarlos hasta la Planta de Residuos, además de monitorear de manera digital el estado de cada baño.
“En otras zonas de Bolivia ya se ha tenido la experiencia de implementar baños secos, pero lamentablemente no ha funcionado muy bien ya que eran los mismos propietarios los que tenían que encargarse de los residuos y no duraban mucho. Hoy gracias a la ayuda del municipio y de la cooperativa esta nueva experiencia de implementación de baños es 100% funcional y aceptada por los vecinos”, acota Paniagua. La asistencia técnica y los recursos para la construcción de los BES son proporcionados por UNICEF, mientras que la alcaldía se encarga de su implementación y de las acciones de sensibilización a la población.
La estructura de cada BES es elevada para no ser dañada por las inundaciones, asimismo, las excretas se almacenan en celdas cubiertas con aserrín que, una vez transportadas a la planta de tratamiento de Montero, en el lapso de un año, se convierten en abono
Guido Meruvia, Oficial de Programas Recursos Naturales, Medio Ambiente y Cambio Climático de la Embajada de Suecia, asegura que la planta de tratamiento de residuos de baños secos cuenta con la tecnología más moderna del país, que además contribuye a la producción de fertilizantes orgánicos. Esta inversión busca crear una “economía circular”, cuyo enfoque es que los residuos puedan transformarse en recursos y generar ingresos, además de aportar a mejorar la calidad de las tierras para la agricultura, impactar positivamente en el medio ambiente y luchar con el cambio climático.
Los usuarios, las comunidades y sus autoridades barriales son capacitados para conocer cómo utilizar los baños ecológicos, quién y cómo se recogen los residuos y sobre el pago de una tarifa por el servicio de 13 bolivianos mensuales por usuario. El consumo de agua de las familias se reduce en casi 50%.
Puntos destacados
- Según datos del Programa de Monitoreo Conjunto (JMP, por sus siglas en inglés) de UNICEF/OMS señalaban que, para 2017, Bolivia tenía la tasa de defecación rural al aire libre más alta de América Latina y el Caribe (38%), aunque en los últimos años ha habido un significativo avance.
- El derecho al agua y saneamiento es fundamental para la vida de los niños, niñas y adolescentes. Ellos tienen derecho a vivir en un entorno libre de contaminación, a vivir en lugares sanos sin exposición a parásitos que les provoquen enfermedades intestinales y otros.
- El acceso a agua y saneamiento genera oportunidades para cada niña, niño y adolescente.
- La pandemia de la COVID-19 ha evidenciado la importancia del acceso a fuentes de agua segura, higiene y saneamiento.
