La Cámara Nacional de Industrias (CNI) y la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB) celebraron la firma de un importante convenio de cooperación interinstitucional. Este acuerdo establece una alianza estratégica para abordar de manera conjunta uno de los desafíos más apremiantes que enfrenta nuestro país: el contrabando y sus nefastas consecuencias.
En relación a este tema, el presidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Pablo Camacho, subrayó, “hemos estado a la vanguardia durante años en la tarea de destacar el impacto del contrabando, no solo en la economía nacional, sino también en la seguridad ciudadana y la integridad institucional. Es crucial reconocer al contrabando como un fenómeno que trasciende fronteras, minando los pilares de nuestra sociedad y representando una seria amenaza para el desarrollo sostenible del país”.
Zulema Alanes, presidenta de la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia, expresó su firme compromiso de promover un periodismo orientado al bien común, en consonancia con los principios estatutarios. Destacó la necesidad de concienciar sobre la importancia de abordar de manera integral este flagelo.
Este convenio representa un hito significativo en la cooperación entre el sector industrial y los medios de comunicación. Entre las acciones acordadas, se incluyen la organización de eventos de capacitación para periodistas sobre el comercio ilícito y su vinculación con el crimen organizado, así como la promoción de alianzas entre el sector privado industrial y los medios de comunicación para difundir información veraz y movilizar a la ciudadanía en la lucha contra el contrabando.
Ambas instituciones se comprometen a definir un plan de acción conjunto que permita alcanzar los objetivos propuestos, mediante la participación activa de sus respectivos afiliados y miembros. La Cámara Nacional de Industrias impulsará acciones entre sus asociados para promover una agenda social contra el contrabando, mientras que la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia fomentará la capacitación, la sensibilización y la generación de contenidos periodísticos que aborden esta problemática de manera integral.
En síntesis, este acuerdo refleja un sólido compromiso de ambas instituciones con la edificación de una sociedad más equitativa, segura y próspera. Uniendo fuerzas, nos dedicaremos a concienciar a la ciudadanía acerca de los peligros del contrabando y a impulsar una campaña nacional en su contra.
La duración de este pacto será de un año, durante el cual se llevarán a cabo evaluaciones periódicas para valorar el impacto de las medidas adoptadas. Por último, Camacho expresó su convicción de que esta colaboración estratégica será un punto de inflexión en la batalla contra el contrabando en Bolivia.