Este jueves, la Alcaldía de La Paz reportó que en dos días de operativos de la intendencia en Cotahuma y San Antonio, se encontraron ratones muertos y sus excrementos entre los panes duros que había; asimismo se evidencio que el personal que trabaja no cuenta con la ropa adecuada y en chinelas.
“Hemos podido detectar presencia de ciertas irregularidades, hay utensilios en mal estado, panes secos que tiene presencia de roedores y otros vectores que demuestra la falta de inocuidad; hemos procedido a clausura, suspensión de dos actividades”, afirmó Marco Agramont, secretario municipal de Desarrollo Económico del GAMLP.
El funcionario pidió a los propietarios que cumplan las normas de inocuidad alimentaria. Ya que en los 20 hornos que fueron inspeccionados se decomisó 130 kilos de pan y se confiscaron latas de horneo en mal estado, ollas sin agarradores y otros utensilios sucios.
Agramont adelantó que la próxima semana se harán más operativos de inspección a los 538 hornos que existen en la ciudad, con el fin de verificar la calidad de los productos a pocos días de celebrar la festividad de Todos Santos.
El Intendente municipal, Esteban Carrasco, aclaró que fue en Cotahuma donde se encontró el negocio que tenía panes duros y roedores muertos debajo las canastas; explicó que en muchos casos, muelen los horneados endurecidos y lo venden a otros negocios de comida que hacen milanesas.
Dijo que el personal municipal entregó formularios de suspensión de la actividad infractora y será la Subalcaldía Cotahuma que determine si corresponde la clausura o una sanción pecuniaria.
Sobre precios referenciales para horneados por Todos Santos, el secretario de Desarrollo Económico dijo que hay una actualización de datos. Según la Alcaldía de La Paz, el costo por horneado de quintal es 182 bolivianos, la libra de bizcochos, 45 bolivianos; la lata de salteñas y humintas, a ocho bolivianos. Y, la lata de galletas, masitas, pan, suspiros, maicillo y otras masas, a cinco bolivianos cada una.