Luego de una inspección a la represa de Incachaca por la reducción del caudal, autoridades de la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas), del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) y del viceministerio de Defensa del Consumidor coincidieron en pedir a la población tranquilidad, porque el agua para consumo humano está garantizado con reservorios conectados a la represa principal.
“Esta represa tiene una capacidad de casi 3 millones metros cúbicos (MMm3), ahora estamos en una capacidad de 1,3 MMm3, pero con la diferencia de que esto es alimentado. Cuando escasea acá, alimentamos con la represa de Estrellani, que está en la cumbre (de La Paz)”, explicó este miércoles el interventor de Epsas, Bladimir Iraizos.
De igual forma, anunció que se trabaja en interconectar las 10 represas de La Paz con el fin de garantizar la provisión de agua.
“Estamos queriendo conectar todas nuestras 10 represas; si faltaría en El Alto, llevar de acá (La Paz) y viceversa, lo único que nos falta es conectar el de Milluni (El Alto) al de La Paz”, explicó.
Para la última semana de noviembre e inicios de diciembre, se prevé la caída de lluvias en el altiplano, con lo que se llenarían los embalses.
“Tendremos lluvias, se han retrasado un poco este año por efecto del fenómeno de La Niña, que persiste desde el año pasado”, concluyó Iraizos.