Tras una semana de polémica con tintes de novela que involucraron a su expareja, el intercultural Wilson Cáceres fue alejado este martes del Ministerio de Desarrollo Rural. En su lugar asumió el cargo Edwin Ronald Characayo Villegas.
“No podemos, en ningún momento, desprendernos de la ética y de los valores y principios (…) la mejor enseñanza que tenemos los dirigentes, las autoridades, es el ejemplo. El mejor principio son las enseñanzas de las luchas en nuestros sindicatos, en nuestras organizaciones sociales y en los hogares donde nos hemos formado”, dijo el presidente Luis Arce tras posesionar al cargo a la nueva autoridad.
Insistió en que esos principios deben ser la guía de todos los funcionarios que llevan adelante el denominado proceso de cambio.
Dijo que posesiona a Caracallo en el cargo con la esperanza de que “tenemos que mantener, sobre todo, esos principios, esos valores, esa ética, esa moral y el compromiso de poner toda nuestra capacidad intelectual al servicio del pueblo boliviano”.
Cáceres duró tres semanas y dos días en el cargo. Su designación comenzó a ser cuestionada luego del escándalo que estalló por haber posesionado a su expareja como jefa de gabinete de su despacho, quien luego emitió una instrucción para desvincular a todos los funcionarios de esa cartera.
Ante ello el ahora exministro negó que sea su esposa, como lo había señalado hace tres meses, pero admitió que eran pareja.
Esta mañana, el ministro de Justicia, Iván Lima, reveló que envió una carta a Cáceres, por la polémica que generó la designación de su expareja.
“En el tema del ministro Cáceres, le he mandado una carta, espero que responda, porque no me hace sentido lo que ha estado respondiendo a los medios. Y ese es un tema grave”, reveló durante una entrevista en radio Fides.
Dijo que tomó esta decisión como parte de su compromiso de cero tolerancia contra las irregularidades y la corrupción, no obstante a que ello eventualmente pueda incomodar al gabinete de ministros.
“Si eso implica que el Ministro de Justicia sea incómodo para el Gobierno, yo no tengo problema. Pero no creo que sea justo para el pueblo boliviano que tengamos un escenario en el cual los funcionarios públicos tengamos que estar dando explicaciones a la prensa, y más esas explicaciones que no convencen a nadie. El que explica se complica y si realmente te has equivocado es mejor dar un paso al costado”, afirmó.
Ya ayer, el exdiputado del Movimiento Al Socialismo, Remberto Calani, demandó la renuncia de Cáceres por el escándalo del nombramiento de su expareja, a quien presentó como su esposa hace tres meses, pero luego dijo que solo fue su pareja, con quien terminó su relación.
