En la plaza Mayor de San Francisco y con una ceremonia ancestral llamada “Illaa Ispallas, tiempo de fertilidad”, en agradecimiento a la Pachamama, se inició este miércoles el solsticio de verano y las actividades de la Alasita 2023.
“Estamos dando inicio al tiempo de soñar con nuestras Illas, estamos dando inicio al tiempo de fertilidad con las Ispallas y de esa forma alcanzar la prosperidad y la abundancia. Además, esta ceremonia tiene el objetivo de recuperar y fortalecer la Alasita que fue declarado Patrimonio Cultural por la UNESCO en 2017”, dijo Rodney Miranda, secretario municipal de Culturas y Turismo.
La Alasita empieza con el solsticio de verano, es decir cada 21 de diciembre, la fiesta ritual también celebra la invocación a la lluvia (jallupacha) para que fertilice la semilla sembrada y de esa forma se inicie el periodo de fertilidad.
Al ritmo de la música autóctona, tarqas, moseños y pinquillos, la ceremonia ancestral se realizó en la plaza Mayor de San Francisco, donde un grupo de amautas ofrecieron una mesa a la Pachamama. Donde participaron autoridades municipales, dirigentes de la Federación Nacional de Artesanos y Expositores de la Feria de Navidad y Alasitas (Fenaena) y la Comunidad de la Vida RTP.
Como parte de la tradición, se puso arcilla fresca (barro) para que la población elabore sus propias illas. Posteriormente, las figuras fueron bendecidas en cuatro mesas que estaban alrededor de una chakana.
En diciembre de 2017, la feria de la miniatura fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, en reconocimiento a los “Recorridos rituales en La Paz durante la Feria de la Alasita”, a la tradición de las ilusiones en miniatura que con el pasar de los años se apoderó de otras regiones del país.
“El solsticio de verano para nosotros representa el inicio de la feria de nuestro querido Ekeko, también nos recuerda que nuestros abuelos llevaban la fiesta de la alasita a diferentes regiones. Quiero agradecer a mis artesanos por estar presentes en esta actividad”, expresó la presidenta de Fenaena, Judith Mancilla.